El cierre de la vía Ibagué – Calarcá por parte del Instituto Nacional de Vías, Invías, no fue de 18 horas sino de más 28 horas continúas, regenerando enorme malestar entre centenares de conductores que aguardaron pacientemente a que pudieran habilitar el esperado viaducto El Tigre, que tiene una longitud de 304.5 metros y se levanta sobre un cañón de 130 metros de profundidad.
El mal tiempo que acompañó la noche del sábado y la madrugada del domingo provocó la demora en la entrega de la obra, informó el Instituto Nacional de Vías.
Según el comandante de la Policía de Tránsito de Ibagué, teniente Diego Montealegre, después de las 8:30 de la noche se habilitó nuevamente el paso vehicular sobre esta importante troncal que une al centro con el suroccidente del país.
El tráfico será lento durante la noche y la madrugada debido a la gran cantidad de vehículos de carga y automóviles que debieron esperar tanto en el departamento del Quindío como en el sector del Tolima.
La apertura del viaducto El Tigre permitirá una reducción en el recorrido en 1.8 kilómetros. En esta obra el Instituto Nacional de Vías, invirtió más de $17.000 millones.
Fuente: El Olfato
